Sensación que rebota como fulgor entre las sombras de los antojos;
placer que ilumina el sendero del apetito y ruborizan las tentaciones.
Entre figura traslucida se revela el misterio de un cuerpo,
que adivina lentamente el principio de un instinto
y el final de un amanecer de amor.
Hondo y desconocido descubrir
que endulza la verdad de sentir,
de vivir los bajos instintos, que despojan el corazón del tiempo
y engañan toda su razón.
Se agita lo que respiras, te sumerges en lo que sientes,
y acaricias el cuerpo uniéndolo a la mente.
Miel irresistible que brota de tus manos,
de mis ojos, de tus labios, de mis venas
incitando a la piel a confesar
«Que se piensa y se desea lo mismo».
Sublime instante donde el Corazón
pierde el mundo hasta tocar las estrellas
y baja una a una, a la tierra
como instintos enamorado sin pudor..
JACQUELINE YUNIS PORTAL